DEFENDER LA ALEGRÍA... INCLUSO DE LA OBLIGACIÓN DE ESTAR ALEGRES.

¿CUÁNTAS VECES…. HAS SONREÍDO?

     Hemos llegado al décimo día de este paréntesis en nuestras vidas. Me parece oportuno preguntarnos las veces que hemos dejado de fruncir el ceño iluminando con una sonrisa el encierro.

- ¡Sí, para eso estamos! Dirán algunos -. Y lo entiendo.

     Yo también he probado. Me he puesto muy serio, he experimentado mis caras de rabia, gritado algún juramento, se me ha escapado alguna lágrima de tristeza, he explorado mis ojos de asombro, me encogido en mi miedo,… Lo he hecho con toda mi fuerza y, teniendo tiempo, me ocupado a fondo en este asunto. Luego he mirado a mi alrededor y todo seguía igual o peor, con menos fuerza, con menos ganas, con desesperanza y nublado mi alrededor.

     No, no me ha funcionado estar enfadado, ni acongojado, ni triste todo el rato.

- Y ¿cómo evitarlo?

     Hace tiempo que lo sabemos. La alegría se convierte siempre en medicina. 

...Y SI NO TE ALCANZA MI ABRAZO QUE TE LLEGUE, AL MENOS, MI MEJOR SONRISA

    Me he acordado durante uno de esos ratos malhumorados. Por una tontería se me ha escapo una carcajada, risa que ha contagiado a todos los que allí estábamos. ¡Funciona! Mientras ríes no cabe ninguna otra emoción que la alegría, al menos mientras dura la risa. Los expertos hablan del sistema parasimpático, de serotonina y de endorfinas. Yo lo que sé, es que al mirar a mi alrededor había más color, más luz en los ojos que yo más quiero y fuera acababa de salir el sol de entre las nubes negras.

     Ya he descubierto cual es mi papel en este momento: Que no se apaguen las sonrisas. Voy a ir intentando rescatar sonrisas de donde están escondidas y pido tu apoyo para ello. A los que tienes cerca sonríeles cada vez que te miran, hazles, si hace falta, cosquillas, mímales con caricias, utiliza el sentido del humor. Llama a quienes están en la distancia, que les llegue alegre y potente tu voz. Escribe, breve por whastapp, o largo como las cartas de antaño, que sientan tu energía y tu buen humor, a pesar de que la tristeza te coma por dentro. Llora si es necesario, descarga tu rabia, comparte tus dudas, tus miedos,… pero, a la vez, tu confianza, y termina con una sonrisa cómplice que se note en la distancia, y en la ausencia.

     En el pueblo tenemos especialistas en el humor, gente que sabe tomarse la vida con cierta sorna, que convierten cualquier situación en motivo de risa, el humor somarda característico de esta tierra. También ellos se hacen imprescindibles, que pasen a la primera línea y nos tengan al pueblo alimentado de sonrisas, sonrisas libres, limpias, fraternales, esperanzadas,...

     Ahora salimos a la ventana a la vez y sonreímos un momento juntos. Después y hasta mañana a la misma hora, vamos a asomarnos a la mirada de los demás, dos, cinco, cien veces, mil si el cuerpo te aguanta, para aplaudirles con nuestra sonrisa, porque se lo merecen, porque nos lo merecemos.

¡DEFENDER LA ALEGRÍA! 

Mario Benedetti

Albalate de Cinca. 24-03-2020

 

Defender la alegría como una trinchera

defenderla del escándalo y la rutina
de la miseria y los miserables
de las ausencias transitorias
y las definitivas

defender la alegría como un principio
defenderla del pasmo y las pesadillas
de los neutrales y de los neutrones
de las dulces infamias
y los graves diagnósticos

defender la alegría como una bandera
defenderla del rayo y la melancolía
de los ingenuos y de los canallas
de la retórica y los paros cardiacos
de las endemias y las academias

defender la alegría como un destino
defenderla del fuego y de los bomberos
de los suicidas y los homicidas
de las vacaciones y del agobio
de la obligación de estar alegres

defender la alegría como una certeza
defenderla del óxido y la roña
de la famosa pátina del tiempo
del relente y del oportunismo
de los proxenetas de la risa

defender la alegría como un derecho
defenderla de dios y del invierno
de las mayúsculas y de la muerte
de los apellidos y las lástimas
del azar
y también de la alegría.