LA CALANDRIA. Pedro Infante
En una jaula de oro
pendiente de un balcón
se hallaba una calandria
cantando su dolor.
Hasta que un gorrioncillo
a su jaula llegó
si usted puede sacarme
con usted yo me voy.
con usted yo me voy.
Y el pobre gorrioncillo
de ella se enamoró
de ella se enamoró
y el pobre como pudo
los alambres rompió.
Y la ingrata calandria
después que la sacó
tan luego se vio libre
después que la sacó
tan luego se vio libre
voló, voló y voló.
El pobre gorrioncillo
todavía la siguió
p'a ver si le cumplía
lo que le prometió
lo que le prometió
La malvada calandria
ésto le contestó
a usté ni lo conozco
ni presa he sido yo.
a usté ni lo conozco
ni presa he sido yo.
Y triste el gorrioncillo
luego se regresó
sentado en un manzano
luego se regresó
sentado en un manzano
lloró, lloró y lloró.
Y ahora en esa jaula
pendiente del balcón
se encuentra el gorrioncillo
cantando su pasión.
pendiente del balcón
se encuentra el gorrioncillo
cantando su pasión.
En una jaula de oro
Pendiente del…
Pendiente del…
HACE UN AÑO. Felipe Valdés
Hace un año que yo tuve una ilusión,
hace un año hoy se cumple en este día;
recordando que en tus brazos me dormía,
y que inocente muy confiada,
te entregué mi corazón.
Ese tiempo tan feliz no volverá,
mi cariño lo pagaste con traiciones,
me has dejado sólo crueles decepciones,
pero anda ingrato, como pagas
otra así te pagará.
El recuerdo de tu amor quiero olvidar,
te quisiera yo arrancar del pensamiento
me quisiera emborrachar de sentimiento,
pero es inútil, que borracha
más y más me he de acordar.
Pero el tiempo es justiciero y vengador
y a pesar de tu hermosura placentera,
si hoy te sobran ya mujeres que te quieran
verás más tarde: no habrá nadie
que se acuerde de tu amor.
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